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Jules Orozco

Siempre llevas una corona.

Periódicos del alma

De niñas siempre nos dicen que lindas es esa corona para ti, te quedaría muy bien.

Esta corona es más linda porque es grande y llamativa… 

Las coronas suelen tener un baño de plata, oro, diamantes y otras cosas más.

Son finas y a veces importadas. Casi siempre son  una insignia y tiene un uso particular.

La verdad resumida,  es que a ninguna de nosotras nunca nos enseñaron a usar la corona. Y creo aprenderlo seria un beneficio. 

Has pensado que el hecho de tomar decisiones importantes te hace sostener una corona.

Cuando hablas de ti con total seguridad y eres capaz de manifestar tus fortalezas y tus debilidades, sostienes una corona. 

Cuando expones tus propios puntos de vistas ante cualquier persona, llevas una corona.

En el momento que decides respetar y vivir por tus propios deseos, tienes una corona. 

En situaciones tensas cuando sacas tu lado comprensivo y tolerante, el mundo te da una corona.

Hablar con tus favoritas y decirles cuanto valen y lo que merecen porque las conoces. Ellas te dan una corona. 

Cuando vives la felicidad con los demás, lo demuestra y le haces sentir cuan importante son en tu vida. Tus amigos te dan corona. 

En la fiesta donde todos  en algún momento están serios, tú sonríes y hablas. Allí llevas la corona. 

Cuando le escuchas la misma historia a una de tus amigas y aun así le vuelves a dar el mismo consejo. Entre amigas se comparten su corona. 

Cuando le cuentas a la gente que eres feliz pero que aún te faltan cosas por vivir y por mejorar. Sostiene una corona. 

Si dejas  a un lado la razón y vives bajo lo que realmente dice tu corazón. Llevas tu propia corona. 

En situaciones complicadas si eres capaz de ver que hay un aprendizaje detrás de todo. Estás por conseguir otra corona. 

Cuando consigues alcanzar una de tus tantas metas personales. Llevas tu propia corona.

Si te viste siempre desde lo que crees que eres. Proyectas tu propia corona. 

Cuando eres capaz de poner tus propios limites. Te auto coronas. 

Si cantas tus canciones favoritas  y las bailas sin importar quienes estén cerca. Sostienes una corona. 

Si te permites ser feliz con pequeñas cosas. Estas disfrutando tu corona. 

Compartir tus momentos favoritos con alguien y sonreír porque Sí. Tienes una corona. 

Si buscas que tu amiga crea en ella y en su poder personal. Están compartiendo la misma corona. 

Cuando eres capaz de distanciarte de situaciones que te perjudican. Estás evitando perder tu corona. 

Al reconocer lo que te hace feliz y lo que verdaderamente te apasiona. Vives con una gran corona. 

Si le hablas al chico que te gusta porque si, otras veces porque no. Pero después te das cuentas que no vale pena.  De verdad no quieres perder tu corona.

Llorar  no te quita la corona, ni estar enfada tampoco. Solo estas tomando un descanso por sostener la corona. 

Demostrar cuanto te importa alguien o algo. No te hará perder tu corona. 

Ir a las fiestas, bailar y comer como nunca.  Es ley para disfrutar la corona. 

Si te enamoras algún día y tienes que renunciar a varias de tus cosas. Corre porque te quieren la robar la corona. 

Al reunirte con tus favoritas y hablar de cada una, contando sus propias historias. Es el mejor desfile con coronas. 

Si un día quieres ir elegante y otro día poco arreglada. Son varias versiones de llevar la corona. 

Cuando viajas, vives nuevas experiencias y visitas lugares. Es la versión turista de la corona.

Si te cumples tus propias promesas. Es una manera de conseguir nuevas coronas.

Así que no dejes que  nadie te diga como usarla, tu hoy ya conoces varias maneras de llevar tu propia corona. 

No tiene que ser importada ni mucho menos tener quilates si la luces segura, tu propia corona te hará brillar más que esa que te regalaron cuando niña y que solo eras capaz de usar encima de la cabeza. 

Hoy no la necesitas en físico, con imaginártela ya brillas con tu propia corona. 

Con Cariño Jules! 

Ph: @Carmenorozcod